(1834-1912), editor, editor, crítico, dramaturgo.
Alexei Sergeyevich Suvorin nació en una familia militar provincial y, al convertirse en periodista, hizo su mayor contribución a Rusia como editor y editor de su periódico conservador más influyente antes de la Revolución. Nuevos tiempos, y como editor de Chéjov.
Primero comisionado en el ejército, Suvorin renunció a los diecinueve años para concentrarse en la enseñanza, el periodismo y la literatura. Después de trabajar para varios periódicos y revistas rusos durante los siguientes quince años, él y un socio adquirieron el tambaleante diario de San Petersburgo, Nuevos tiempos, en 1867. Se convirtió en el buque insignia de un negocio exitoso desde el punto de vista financiero que llegó a incluir la publicación de libros, la venta en librerías de empresas y quioscos de estaciones de tren, y una escuela de impresores. Suvorin aprovechó las oportunidades brindadas por una relajación de la censura zarista en 1865, las demandas de una población cada vez más alfabetizada, la producción en masa posibilitada por la nueva tecnología de impresión y la rápida comunicación de noticias por medio del telégrafo.
Como crítico literario experimentado y aspirante a dramaturgo, Suvorin en 1895 fundó su propia compañía teatral y la instaló en su propio teatro. Escribió lo revelador y personal Diario de AS Suvorin (1923), relato de la vida literaria y política de su tiempo nunca traducido al inglés.
Suvorin reconoció la promesa literaria de Antón Chéjov cuando publicó por primera vez historias en pequeñas publicaciones rusas. Durante su colaboración de trece años desde 1886 hasta 1899, Chéjov publicó historias importantes y obras de teatro con Suvorin. Los dos se hicieron amigos cercanos, y ese vínculo alivió para Suvorin las tragedias de su propia vida familiar. Tanto su primera esposa como un hijo se suicidaron, mientras que otro hijo y una hija murieron de enfermedades.