Nancy Wexler

La psicóloga Nancy Wexler (nacida en 1945) investigó la enfermedad de Huntington y desarrolló una prueba presintomática para la afección, así como la identificación de los genes responsables de la enfermedad.

La investigación de Nancy Wexler sobre la enfermedad de Huntington ha llevado al desarrollo de una prueba presintomática para la afección, así como a la identificación de los genes responsables de la enfermedad. Los síntomas de este trastorno fatal de origen genético (por el que la propia Wexler está en riesgo) suelen aparecer alrededor de la mediana edad, y la enfermedad conduce a la degeneración del funcionamiento mental, psicológico y físico. Por su papel fundamental en estos logros, Wexler recibió el Premio al Servicio Público Albert Lasker en 1993.

Nancy Sabin Wexler nació el 19 de julio de 1945 de Milton Wexler, un psicoanalista de Los Ángeles, y Leonore Sabin Wexler. Estudió relaciones sociales e inglés en Radcliffe y se graduó en 1967. Posteriormente, Wexler viajó a Jamaica con una beca Fulbright y estudió en el Centro de Capacitación Psicoanalítica Infantil de la Clínica Hampstead en Londres.

En 1968, Wexler se enteró de que su madre había desarrollado los síntomas de la enfermedad de Huntington, una afección a la que el abuelo materno de Wexler y tres tíos ya habían sucumbido. Los esfuerzos para combatir la enfermedad se convirtieron en una misión principal para Wexler y su familia: su padre fundó la Fundación de Enfermedades Hereditarias en 1968, y la propia Wexler, que entonces estaba ingresando al programa de doctorado en psicología clínica en la Universidad de Michigan, finalmente escribió su tesis doctoral. sobre las "Características perceptivo-motoras, cognitivas y emocionales de las personas en riesgo de padecer la enfermedad de Huntington", y recibió su Ph.D. en 1974.

Después de graduarse de la Universidad de Michigan, Wexler enseñó psicología en la New School for Social Research en la ciudad de Nueva York y trabajó como investigador sobre la enfermedad de Huntington para los Institutos Nacionales de Salud (NIH). En 1976 fue nombrada por el Congreso para presidir la Comisión de los NIH para el Control de la Enfermedad de Huntington y sus Consecuencias. En 1985 se incorporó al Colegio de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia.

En 1979, la investigación de Wexler la llevó al lago de Maracaibo en Venezuela, donde estudió una comunidad que tenía una alta incidencia de la enfermedad de Huntington. Wexler mantuvo registros médicos, tomó muestras de sangre y piel y registró la transmisión de la enfermedad dentro de las familias. Wexler envió las muestras que recolectó al genetista James Gusella en el Hospital General de Massachusetts, quien utilizó las muestras de sangre para realizar un estudio para localizar el gen, el primer mapeo genético de una enfermedad. Gusella finalmente descubrió un marcador de ácido desoxirribonucleico (ADN) cercano al gen de Huntington. Con base en este estudio, Gusella introdujo una prueba que tenía una precisión del noventa y seis por ciento para detectar si un individuo portaba el gen de Huntington. Debido a que todavía no había cura para la enfermedad de Huntington, la prueba resultó ser controvertida y planteó muchos problemas relacionados con los derechos de los pacientes, las decisiones sobre la maternidad y la discriminación por parte de empleadores y compañías de seguros. En sus entrevistas y escritos, Wexler ha enfatizado la importancia de mantener confidencial dicha información genética.

En 1993 se identificó el gen de Huntington mediante una investigación basada en muestras de sangre venezolanas y el trabajo del Grupo de Investigación Colaborativa de la Enfermedad de Huntington. En octubre de 1993, Wexler recibió un premio al servicio público Albert Lasker por su papel en este esfuerzo. Además, se ha desempeñado como asesora en temas de ética médica y social para el Proyecto Genoma Humano, un esfuerzo internacional masivo para mapear e identificar los aproximadamente 100, 000 genes en el cuerpo humano. Wexler también ha asumido la dirección de la Fundación de Enfermedades Hereditarias fundada por su padre, a la que donó los honorarios que acompañan al Premio Lasker.

Como pionero en el campo de la gestión de la atención geriátrica, Wexler fue miembro fundador de la Asociación Nacional de Administradores Profesionales de la Atención Geriátrica. Sher sirvió en la primera Junta Directiva Nacional de la organización, así como en el primer comité de estándares de la asociación. Se desempeña como directora de Gerontology Associates, Servicios de colocación profesional de administración de casos de Alzheimer en Los Ángeles y forma parte del personal del Instituto Neuropsiquiátrico de UCLA, el Centro Médico Regional Encino-Tarzana y el Hospital Northridge.

Otras lecturas

Acerca de Nancy Wexler, MA, MFCC, "http://www.nancy-wexler.com/bio.htm", 23 de julio de 1997.

Generadores de noticias, Gale, 1992, págs. 530-33.

US News & World Report, 22 de abril de 1985, págs. 75-76.

Bluestone, Mimi, "Ciencia y ética: la doble vida de Nancy Wexler", en Em., Noviembre / diciembre de 1991, págs. 90-91.

Grady, Denise, "El tic-tac de una bomba de tiempo en los genes", en Descubrir, 1987 junio.

Jaroff, Leon, "Sacar lo mejor de un gen malo", en Tiempo, 10 de febrero de 1992, págs. 78-79.

Konner, Melvin, "Nuevas claves para la mente", en Revista del New York Times, 17 de julio de 1988, págs. 49-50.

New York Times 1 de octubre de 1993, pág. A24. □