Papel importante. Los escribas desempeñaron un papel vital en la burocracia gubernamental, la religión y la vida intelectual del antiguo Egipto. Hubo un claro desarrollo a lo largo del tiempo desde los escribas que registraban la palabra hasta los intelectuales que creaban el texto que escribían. El egiptólogo Alessandro Rocatti ha especulado que la importancia del escriba durante el Reino Antiguo (circa 2675-2130 a. C.) fue su capacidad para leer las palabras con precisión. Esta capacidad fue más valorada que la habilidad para escribir en sí misma. La precisión de la lectura habría sido especialmente importante en los rituales religiosos donde los sacerdotes recitaban hechizos exactamente como los dioses habían ordenado. Durante el mismo período, a otros escribas se les encargó mantener registros administrativos, pero habrían tenido un estatus social más bajo.
Necesidad creciente. Literatura más allá de las listas administrativas y los textos religiosos desarrollados durante el Reino Medio (alrededor de 1980-1630 a. C.). Incluía narrativas; manuales de medicina, matemáticas y astronomía; y mapas. El gobierno durante el Reino Medio también aumentó su dependencia de la palabra escrita. Esta dependencia llevó a la necesidad de más escribas, fuente de movilidad social en este período. Al menos algunos escribas administrativos descendían de agricultores que de alguna manera habían reconocido las habilidades de sus hijos.
Clase intelectual. En el Reino Nuevo (circa 1539-1075 a. C.) se desarrolló una clase intelectual de escribas. Admiraron a los famosos autores del Reino Antiguo y Medio: Hardjedef, Imhotep, Khety y Neferti. Estos cuatro hombres eran funcionarios de alto rango del pasado, cuya memoria se mantuvo a través de sus escritos. La nueva clase intelectual se autodenominaba escribas y elaboraba en su propio tiempo manuales de conducta. Este grupo incluye a Ani y Amenemope. El Imperio Nuevo también produjo escribas que podían traducir idiomas extranjeros como el acadio, utilizado en Mesopotamia, y el hitita, utilizado en Anatolia. En el Período Tardío (circa 664-332 a. C.) los escribas enfatizaron su capacidad para encontrar e interpretar textos más antiguos.