En un momento en que las mujeres todavía eran consideradas el "sexo más débil", Babe Didrikson demostró que las mujeres podían ser fuertes y sobresalir en el atletismo. Didrikson fue un fenómeno deportivo en las décadas de 1930 y 1940 que allanó el camino para Jackie Joyner-Kersee (1962–), Mia Hamm (1972–) y otras destacadas atletas femeninas de las décadas de 1980 y 1990. Fue la primera mujer en desafiar las nociones de lo que las mujeres podían y deberían hacer atléticamente.
Didrickson nació en Port Arthur, Texas, y se mostró prometedor en el atletismo a una edad temprana. Su objetivo personal era "ser la mejor atleta que jamás haya existido", como cita Susan E. Cayleff en Bebé. Ella era una jugadora de baloncesto de la escuela secundaria AAU All-American. En 1932, ganó por sí sola los Campeonatos de Atletismo por equipos de la AAU y terminó primera en cinco de los ocho eventos en los que participó. Luego compitió en el Juegos Olímpicos (ver entrada bajo 1900 — Deportes y juegos en el volumen 1) de 1932, ganando tres medallas de oro y una de plata.
En 1934, Didrickson adoptó un nuevo deporte, el golf. Ganó diecisiete torneos consecutivos entre 1946 y 1947. Durante su larga carrera, ganó ochenta y dos torneos y fue fundamental en la formación de la LPGA en 1950. En 1938, se casó con el luchador profesional George Zaharias (1908? -1984). Didrikson murió de cáncer en 1956 y seis años más tarde fue nombrada la mejor atleta femenina de la primera mitad del siglo XX por Associated Press.
—Jill Gregg Clever
Para más información
Cayleff, Susan E. Babe Didrikson: el mejor atleta de todos los deportes de todos los tiempos. Berkeley, CA: Try Press, 1995.
Freedman, Russell. Babe Didrikson Zaharias. Nueva York: Clarion Books, 1999.
Sutcliffe, Jane. Babe Didrikson Zaharias: Atleta integral. Minneapolis: Carolrhoda Books, 2000.